jueves, 27 de septiembre de 2007

Bolognesi en el Morro de Arica

Esteban Silva Cuadra
19 de February de 2005
Diario Perú 21, Lima


No olvidaré aquella tarde del 28 de julio de 2001 en Lima. Por primera vez conocí en Palacio de Gobierno el Despacho Presidencial. En un lugar destacado, se encuentra un impresionante cuadro del Coronel Francisco Bolognesi.

Me impactó profundamente la fuerza y solemnidad de la imagen. En ese instante dimensioné el profundo peso cultural de la historia en la memoria y socialización de los pueblos, su importancia y sentido simbólico.

La semana pasada, el Comandante en Jefe del Ejercito de Chile, General Emilio Cheyre anunció que se instalará en el Museo de sitio del Morro de Arica un cuadro del Coronel Francisco Bolognesi, héroe del Perú, encargado de la defensa del Morro, aquel 7 de junio de 1880. Cheyre explicó que: "El objetivo es rendir tributo a todos lo que allí lucharon por una causa noble, que hoy se proyecta en cooperación y amistad".

El anuncio del General Cheyre no hubiera sido imaginable sin el necesario proceso, que actualmente viven los chilenos, de confrontarse con su propia historia buscando la verdad y la justicia para recuperar la memoria colectiva, frente a las graves violaciones de los derechos humanos que afectaron a la sociedad chilena a partir del golpe militar de 1973.

Comentando el informe de la Comisión Nacional sobre Prisión Política y/o Tortura, el General Cheyre señaló que: "El Ejercito de Chile tomó la dura, pero irreversible decisión de asumir las responsabilidades que como institución le cabe en todos los hechos punibles y moralmente inaceptables del pasado."Unas violaciones que no justifica y respecto de las cuales ha hecho y seguirá haciendo esfuerzos concretos para que nunca más vuelvan a repetirse". En ese nuevo contexto, inscribe los cambios para una nueva arquitectura institucional:"-que se sustenta en considerar a nuestros vecinos como verdaderos socios y amigos con proyectos comunes".

Considero éstas decisiones muy positivas, pues se inscriben en un proceso necesario e indispensable: realizar gestos y construir medidas de confianza mutua que tengan incidencia en nuestras percepciones culturales.

Las relaciones entre Perú y Chile se han incrementado significativamente en los últimos años. Durante el 2004, el intercambio comercial alcanzó alrededor de 1.300 millones de dólares. Múltiples y dinámicas son las áreas de cooperación públicas y privadas entre ambos países.

Sin embargo, la relación entre nuestros pueblos es mucho más rica, diversa y compleja y no se agota en el comercio y las inversiones. Ella debe comprender los factores políticos, sociales, económicos, comerciales, culturales, étnicos y de seguridad colectiva. Sin ir más lejos, en el mes de enero, en el marco de su 27º Congreso, el Partido Socialista, partido de la concertación en el gobierno y de cuyas filas proviene la doctora Michelle Bachelet, quién tiene altas posibilidades de convertirse en la primera mujer Presidenta de Chile, señaló:

"Los socialistas estimamos que se deben tomar medidas adicionales que hagan posible disminuir el distanciamiento y la desconfianza que todavía predomina entre los pueblos chileno y peruano, cuya raíz se remonta a la Guerra del Pacífico y que de tiempo en tiempo se enardece artificialmente por causa de la acción de fuerzas ultranacionalistas y retrógradas en ambos lados de la frontera. Consecuentemente, somos partidarios que el Estado de Chile, a través de las instituciones pertinentes, haga gestos prácticos y simbólicos que remuevan ciertos obstáculos que ensombrecen y complican innecesariamente las relaciones entre nuestros respectivos pueblos".

Los gestos prácticos y simbólicos referidos apuntan a la ubicación seria y responsable en Chile de los libros y archivos pertenecientes a la Biblioteca Nacional del Perú, y de otros como los del Palacio de Torre Tagle, para ser devueltos al Perú y a los peruanos.

Esteban Silva Cuadra
Analista Internacional

No hay comentarios: